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SALVEMOS A AVIACSA

México es un país de monopolios. A los mexicanos nos encantan los monopolios. Difícilmente se pueden entender las votaciones del 5 de julio sin esta afición. O Televisa. O Telmex.

Pero el monopolio en las comunicaciones no debe suceder. Debemos salvar a Aviacsa. Aviacsa es la aerolínea que ha entendido mejor a los mexicanos. Cierto, Aeroméxico te sirve sanduichitos y Mexicana te atiende con unas azafatas con mascadas. Lo que los mexicanos queremos es volar rápido, seguro y barato. Y eso no lo han entendido los chilangos, sino los regios.

Aeroméxico, Mexicana e Interjet (Televisa) presionan al gobierno federal para cerrar Aviacsa y desaparecer la competencia del mercado. También están presionando para que los dejen fusionarse en una sola empresa.

Esto no es secreto, ni alguien me ha pasado información confidencial. Esto ha sido declaración pública desde hace varios años, pues la Comisión Federal de Competencia lleva lo que va del sexenio resistiendo la fusión de las aerolíneas. Pero las empresas han buscado el camino de quebrar a la competencia, y lo están logrando.

Aviacsa representa los intereses ciudadanos mucho mejor que ninguna otra compañía aérea, quizá con excepción de Viva Aerobús. El argumento de Aeroméxico y Mexicana es que el gobierno debe optar por un modelo de aviación, uno ejecutivo o uno económico. En un país con 60 por ciento de pobres, y clases medias empobrecidas, emociona ver cómo en Viva Aerobús vuelan ancianos que nunca soñaron con poderlo hacer.

Aeroméxico y Mexicana apuestan a quedarse con todo el mercado, así sea a costa de los mexicanos.

Mención aparte es el tema de que el presidente del empleo está cerrando fuentes de empleo. Los empleados de Aviacsa no podrán incorporarse a las otras aerolíneas, y como los pilotos de Alma de México, terminarán fumigando campos, o transportando droga. La competencia permite precios más competitivos y más gente volando. Destruir la competencia sólo contribuye a destruir más este empobrecido país.